miércoles, 7 de diciembre de 2011

Pastelillos de carne



Receta bestial con fotos penosas...  Lo sé...   Esta receta estaba en la recámara precisamente por eso. De hecho andaba en el apartado de "borradores" desde hace unos 3 años. Lo cierto es que revisando esta receta he empezado a babear como el perro de Pavlov, y eso pese a unas fotos nefastas. Con esto quiero decir que merece la pena realizar esta preparación, aunque tengáis que hacer un acto de fe para compensar lo poco apetitosa que aparece bajo el objetivo de la cámara, cuando el resultado al paladar (e incluso a la vista) no tiene nada que ver con el que se ve en las fotos. 

Por otro lado, os adelanto que estoy poniéndome las pilas en cuestiones fotográficas, tanto en conocimientos como en equipamiento. Hace 3 años era un penoso fotógrafo, y hoy por hoy soy malo. Espero que vosotros mismos vayáis notando el cambio. 

Y vamos al lío. 

Para 6 pastelillos

- 150 grs de carne picada (al gusto: cerdo, ternera, mezclada...)
- 1 cebolla pequeña
- Una lámina de hojaldre
- AOVE
- Tomate frito (al gusto)
- Unas gotas de Tabasco (al gusto)
- Pimienta
- Sal
- Un huevo


Comenzamos con un sofrito típico como para hacer una bolognesa. Siempre a vuestro gusto. Podéis añadirle calabacines, berenjenas...  A veces es la nevera la que manda (vaya, las cosas que necesitemos consumir con más urgencia). 

La carne y las verduras bien especiadas y rehogadas, el punto de salsa de tomate que os guste...  Podéis consultar recetas anteriores si tenéis dudas (y de paso, ojeáis el resto del blog). 



Recordad siempre retirar el exceso de grasa, si se ha producido. Yo suelo hacerlo antes de incorporar cualquier elemento líquido (como la salsa de tomate). Se puede hacer después, pero pescar el aceite separándolo de lo que no lo es resulta más complicado a posteriori, y puedes tirar lo que no debes. Si habéis calculado bien las cantidades (tanto de aceite como considerando la grasa que va a soltar la carne) no tendréis ese problema. Eso demuestra además que sois la leche con las medidas. Bravo. 


Ahora extendemos nuestra masa de hojaldre. En este caso, fresca (pero comprada). La cortamos en unos cuadrados de más o menos 7x7 / 8x8  centímetros. Poco más o menos, cada pastelillo nos va a acoger una cucharada sopera y media de relleno. 


Como veis en las fotos, doblamos un tercio de la pasta encima del relleno y lo pincelamos con agua, para que quede bien sellado. Vaaaaaale. También se observa que no he retirado el aceite suficiente del relleno. Buena capacidad de observación, cabroncetes. 

Doblamos el otro tercio de pasta encima del anterior, y dejamos los extremos a la virulé, para que de paso, se salga el exceso de aceite... (y que no se agrieten o revienten por donde no toca...


Acabamos pincelando con el huevo batido. 


Y sobre el papel de hornear y en crudo quedan feos, irregulares...   

Pero la magia de 20 minutos al horno precalentado a 180 grados sumado a las maravillosas propiedades del hojaldre y la pintura de huevo batido nos darán como resultado unos pastelillos bastante igualados, brillantes, doraditos y espléndidos. Véase la primera foto e imagínese con unos cuantos megapíxeles más, y una iluminación en condiciones. 


No me seáis descreídos y probad a hacerlos. Entonces, me contáis. 

Un abrazo, fogoneros!


Corona de verduras




Este es un plato muy sencillo y que admite un montón de variantes. Lo más importante para que el resultado sea vistoso es tener buenos utensilios de cocina. En mi caso, un molde de silicona que da unos resultados fantásticos.

La textura de este plato es similar a la de un flan, en este caso relleno con verduras. Es un entrante ligero y muy rico.  

INGREDIENTES (para 4 personas)

- 4 zanahorias grandes
- 4 huevos
- 1 calabacín
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 1 cebolla
PREPARACIÓN:

Lo primero, sofreir las verduras (excepto la zanahoria). Las salamos al gusto. Las reservamos para después.



A continuación, cocemos las zanahorias. Más o menos 15-20 minutos según lo grandes que sean. Con una batidora trituramos las zanahorias junto con los 4 huevos.


Ahora, rellenamos el molde de la siguiente forma:  una capa del preparado de huevo y zanahoria de más o menos un dedo de grosor para empezar, y a continuación una capa de verduras. Repetimos el proceso hasta terminar con una capa de huevo y zanahoria batidas.


Ya tenemos el molde relleno:


Ahora, lo introducimos en el horno precalentado a 200 grados, dentro de un recipiente con agua, para que se haga al baño maría.  Lo tendremos en el horno de 30 a 40 minutos.


Este es el resultado antes de desmoldar:


Y el resultado en la mesa, lo tenéis en la primera foto. Yo rellené el agujero central con tomate frito, pero como siempre, la presentación os la dejo a vuestro gusto.

Que aproveche!

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Hamburguesas de Blanco y Negro






Básicamente esto es un par de hamburguesas...  ¿verdad?  Pues no. Son un poquito especiales.

En Valencia, uno de los almuerzos más populares es el Blanc i Negre. Básicamente un bocadillo de longaniza y morcilla. ¿Por qué no fusionarlas en una hamburguesa, que resulta mucho más fácil de sujetar y comer? Además, tiene la ventaja de no tener que buscar el sabor de ambas piezas de embutido pretendiendo abarcar las dos en cada bocado.

Si me preguntáis de quién ha sido la idea, lo confieso: no es mía. Como en muchas de mis recetas, hay un tercero que me comenta: he comprado hamburguesas de "blanco y negro" en "tal mercado". Y yo voy y las copio, o mejor dicho, las interpreto. Sinceramente, no he probado todavía las hamburguesas de "blanc i negre" de ese mercado, pero aquí os ofrezco las mías, que tras varias pruebas, están riquísimas.

Por cierto, ¡gracias, Fernando! (compañero de trabajo y amigo)

Veamos los ingredientes:


Las morcillas son de la población de Ontinyent (Onteniente). Están oreadas, o sea, secadas durante cierto tiempo. No tengáis reparo en utilizar cualquier morcilla que tengáis a vuestro alcance, siempre que sea de cebolla. De hecho, la morcilla no es uno de los fuertes de mi comunidad, y puede que sí lo sea de la vuestra. En este caso, las de Ontinyent son de lo mejorcito que tenemos. Del mismo modo podría nombrar Requena, donde el embutido y el vino son casi una religión. 

Como podéis observar, tenemos:

INGREDIENTES (Para 2 hamburguesas):

- 2 morcillas (oreadas)
- 4 longanizas
- 100 grs de carne picada (mixta cerdo-ternera)
- sal y pimienta


PREPARACIÓN:

Como se aprecia en la anterior foto, las longanizas van sin tripa (una tarea que me ahorro). Las morcillas oreadas son fáciles de "destripar": un corte a lo largo, y las desnudamos sin pudor alguno.

Amasamos la carne de las longanizas con la carne picada, hasta que os quede un amasijo cárnico como este:




Salpimentamos a nuestro gusto  (pero ojo a las longanizas, no vayan a ir condimentadas), y por otra parte trituramos las morcillas. Yo he usado una picadora eléctrica. Se trata de no encontrarnos trozos de cebolla en la textura de la hamburguesa. Como véis, al triturar la morcilla, la sangre se mezcla con la cebolla y la grasa, y el color de esa mezcla no es tan negro como en la morcilla original. La cosa queda así, antes de amasarlo todo:



Si la mezcla os resulta complicada de manejar (es muy pegajosa) podéis añadir un poco de pan rallado al asunto. La masa será mucho más manejable, pero el resultado -sin ser malo- no será tan espectacular. La mezcla, acabada, es una cosa así: 


Moldeamos las hamburguesas, haciendo primero una gran albóndiga (del tamaño de un limón, más o menos) y la aplastamos sin piedad hasta formar la hamburguesa.  Freímos en aceite, a fuego bastante lento, teniendo en cuenta que la morcilla se dora enseguida. Se trata de que tenga buen aspecto sin que esté cruda, y estamos trabajando con ingredientes con puntos de coccion muy diferentes. 


Tras pasarlas por la sartén, el aspecto que toman es el que véis en la primera foto. El sabor, indescriptible.

En definitiva, os dejo aquí mi versión española del "cuarto de libra" americano, mejorada con los sabores de la tierra.

Queda terminantemente prohibido el uso de ketchup y mostaza en esta hamburguesa. Ni lechuga, pepinillos...   Si se quiere acompañar de algo, tal vez unas patatas a lo pobre, unos pimientos verdes fritos, un poco de ajoaceite....    Estamos en España, y punto. 

Espero que os guste tanto como a mi. ¡Un abrazo!

lunes, 26 de septiembre de 2011

BOB ESPONJA

Hola de nuevo a todos. Tras este descanso blogístico que me he pegado, me he decidido a vencer la pereza y comenzar de nuevo a hacer cositas. Hoy os pongo un Bob Esponja que me curré ayer para la niña de la casa.

La verdad es que nutritivo, lo que se dice nutritivo, no lo es mucho. Al final no es más que una rebanada de pan de molde (con corteza) y una loncha de queso fundido, junto con algunos trocillos de jamón de York y adornos de calabacín.

Os dejo la idea y que cada cual decida sus ingredientes.

Un abrazo a todos.